Limonero

El limonero es un árbol de hoja perenne de tronco delgado y algunas raíces que sobresalen del suelo. Alcanza una altura que oscila entre los 3 y los 6 metros, y posee numerosas ramas delgadas, muchas de las cuales cuentan con espinas. Las hojas miden hasta 10 centímetros de largo; muestran una forma elíptica u ovalada y están ligeramente dentadas en los bordes. Poseen un color verde oscuro en el haz y verde pálido en el envés. Las flores, popularmente conocidas como azahares o flores de azahar, son pequeñas y crecen solitarias o en grupos de 2 o más. Su color es blanco con un capullo violáceo, 5 sépalos cóncavos y 4 o 5 pétalos de unos 2 centímetros de longitud. El centro está adornado con numerosos estambres (hasta 40) con anteras amarillas y un ovario superior. Despiden un aroma fresco y agradable. [caption id="attachment_10953" align="aligncenter" width="800"] Hojas, flores y frutos de Citrus × limon.[/caption] Los frutos, los limones, son ovalados y generalmente tienen una protuberancia en un extremo. Su piel es relativamente gruesa y su color es amarillo claro o verdoso. Es áspero al tacto, debido a las pequeñas vesículas en la superficie. Por dentro, la pulpa es amarillo pálido a verde y se compone de sacos unidos entre sí rellenos de zumo. Es jugoso y ácido. Aunque por lo general hay varias semillas, algunas variedades carecen de ellas. Se cree que Citrus x limon es el resultado de la unión entre el naranjo amargo y la cidra.

• Orden: Sapindales
• Familia: Rutaceae
• Género: Citrus

Se desconoce el lugar exacto donde se originó el limonero, pero es muy probable que haya sido en Asia, en la región del actual Assam, India, o en el norte de Birmania o China. Por lo general se acepta que su cultivo se realizó primero en India y Pakistán, después se le llevó a Persia y posteriormente a la región mesopotámica, entre los ríos Tigris y Éufrates.

Durante el Imperio Romano, el limón ya se consumía en Roma, pero su cultivo no se extendió hacia toda Italia. Fue en el siglo XVIII cuando los árabes lo introdujeron en África y Sicilia, y hasta la Edad Media llegó a Francia y España. Gracias a los viajes de Cristóbal Colón, el limonero llegó a América. En el presente, el cultivo del limonero está muy extendido en gran parte del mundo. Los principales productores y exportadores del fruto son España, Italia, Grecia, Turquía, Chipre, Líbano, Sudáfrica y Australia. En América, destacan como productores México y Estados Unidos.

Los limoneros son capaces de florecer durante todo el año, pero lo más común es que lo hagan durante primavera o verano. Las flores, hermafroditas (órganos sexuales de ambos sexos están en la misma flor), son polinizadas por insectos, frecuentemente abejas. El árbol puede autopolinizrsese, es decir, ser polinizado por sus propias flores masculinas, así que no necesita tener otros limoneros cerca para desarrollar frutos. Limón verde, variedad de limón. Los limoneros pueden ser cultivados a partir de semillas o esquejes, en zonas húmedas, subtropicales y hasta secas. Crecen preferentemente a pleno sol, pero toleran un poco de sombra. Eso sí, no aguantan muy bien las heladas, pues la madera puede morir a -6.5 ºC, en tanto las flores y frutos jóvenes a -5 ºC. La pulpa del limón es lo que contiene los altos niveles de vitamina C.

El fruto es el producto más preciado del limonero. De él, su zumo es altamente valioso en la preparación de jugos refrescantes, múltiples platillos y postres y varios medicamentos y cosméticos. También se usa como saborizante para galletas, pasteles, conservas, helados, sorbetes y otros productos comestibles comerciales. La pulpa contiene altos niveles de vitamina C. El aceite de la cáscara se usa en abrillantadores para muebles, jabones, champús, detergentes y colonias. El jugo tiene aplicaciones en la cosmética tradicional y comercial; por muchos años se ha aplicado en la piel para aclararla y desvanecer manchas y pecas. La madera, compacta y fácil de trabajar, se utiliza para fabricar algunos artículos pequeños, como utensilios de cocina y juguetes. El limonero tiene efectos antiinflamatorios y diuréticos, y puede mejorar la circulación sanguínea periférica. Se ha usado para tratar várices, hemorroides, cálculos renales, congestión de los bronquios, dolor de garganta y picaduras en la piel. El consumo del aceite aumenta el número de glóbulos blancos en la sangre y estimula el sistema digestivo. Se puede aplicar en la piel para aliviar quemaduras solares y como repelente de insectos. A pesar de sus múltiples usos y bondades, la ingesta excesiva de limones produce erosión dental y hace a los dientes más susceptibles a la caries.

El árbol a veces es objeto del ataque de hongos y bacterias que causan enfermedades como la verrugosis, el mal seco, la gomosis, la mancha grasienta y la antracnosis, solo por mencionar algunas. Si crece con carencia de micronutrientes sus ramas se atrofian. Al margen de sus enfermedades, el limonero no está en peligro de extinción o globalmente amenazado.

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