Demonio de Tasmania

Seguramente conociste a este animal en la serie Looney Tunes, sin embargo, ahora te contamos qué animal es el demonio de Tasmania.

• Es un marsupial cuyo nombre científico es Sarcophilus harrisii.
• Pelaje robusto y negro parduzco, con mancha blanca en la garganta, costados y parte trasera.
• Hocico rosado y cabeza enorme con músculos mandibulares bien desarrollados.
• Molares pesados adaptados para triturar huesos y desgarrar músculos y piel gruesa.
• El tamaño del demonio de Tasmania varía de 525 a 800 mm de longitud total y cola de 230 a 300 mm.
• Los machos alcanzan hasta 12 kg y 30 cm de altura al hombro y las hembras de 4,1 a 8,1 kg.
• Dimorfismo sexual, con machos ligeramente más grandes que las hembras.
• Son endotérmicos y homeotermos, con simetría bilateral.
• Almacenamiento de grasa en la cola, característica común entre los dasiuridos.
• Bolsa marsupial completamente cerrada durante la reproducción, con cuatro mamas en las hembras.
• Vida máxima en estado salvaje de hasta 5 años; en cautiverio de 7 a 8 años (promedio 8,2 años).

El monstruo de Tasmania se distribuye en el estado insular de Tasmania, Australia, ocupando diversos ecosistemas naturales y modificados por humanos, desde la costa hasta las montañas. Se encuentra en bosques de eucalipto, zonas arboladas, matorrales costeros y terrenos agrícolas, aprovechando la abundancia de carroña disponible allí.

Ahora que ya sabes dónde vive el diablo de Tasmania actualmente, quizá te interese conocer el pasado de esta especie. Los restos fósiles muestran que fue común en el continente australiano hasta su extinción allí hace entre 3.200 y 3.500 años. En la actualidad su distribución se restringe a Tasmania y no incluye las islas del estrecho de Bass, aunque en la isla Flinders se han hallado subfósiles que evidencian su presencia histórica en otras islas cercanas.

Estos animales australianos son principalmente carroñeros, alimentándose de cadáveres de animales muertos como ualabíes, pequeños mamíferos, aves, reptiles, anfibios e insectos. En zonas agrícolas también consumen carroña de ovejas y ganado. Pueden actuar como depredadores cazando presas vivas.

Sus poderosas mandíbulas y dientes desgarradores les permiten devorar completamente su alimento, incluidos huesos y pelaje. Son conocidos por sus ruidosas comidas comunitarias, donde emplean ruidos y exhibiciones amenazantes para imponer su dominio. Al actuar como voraces, consumen grandes volúmenes de alimento de una sola vez, ayudando a mantener limpio su entorno al devorar carroña sin importar su grado de descomposición.

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Los demonios de Tasmania son principalmente nocturnos y se refugian durante el día bajo piedras, en cuevas, arbustos, antiguas madrigueras de wombats o troncos huecos. Al anochecer recorren hasta 16 km cada noche en busca de alimento, guiados por su agudo olfato y oído. No son territoriales en el sentido estricto, pero cada individuo mantiene un área de distribución propia que ajusta según la disponibilidad de carroña o presas.

Los demonios jóvenes destacan por su agilidad y capacidad para trepar árboles, y dedican tiempo al juego: forcejean, muerden y emiten ruidos, comportamientos que luego reproducen en las comidas cuando alcanzan la madurez.

Los demonios de Tasmania alcanzan la madurez sexual en su segundo año de vida y típicamente se aparean en marzo, dentro de un sistema poliginándrico en el que los machos compiten por el acceso a las hembras reproductoras sin establecer vínculos duraderos. Tras un breve periodo de gestación de unos 21 días, las hembras dan a luz a una gran camada de entre 20 y 30 crías, conocidas como "joeys", en abril. No obstante, al contar únicamente con cuatro pezones, la mayoría de las crías no sobrevive, de modo que normalmente solo cuatro joeys llegan a alimentarse.

Las crías pasan alrededor de cuatro meses dentro de la bolsa marsupial, orientada hacia atrás, donde continúan desarrollándose protegidas. Una vez transcurrido este tiempo, la madre las deja en una madriguera, como troncos huecos o cuevas, hasta que alcanzan el destete completo a los cinco o seis meses de edad.

Durante siglos, los demonios de Tasmania fueron desplazados por el dingo en el continente. Con la llegada de colonos europeos en el siglo XVIII se les consideró plaga. En la actualidad, se encuentra categorizado como "en peligro", y entre sus amenazas destacan los ataques de perros domésticos, zorros, atropellos y pérdida de hábitat. Además, que el águila audaz compite por la carroña.

Para la conservación, el Programa para Salvar al Diablo de Tasmania ha establecido poblaciones libres de enfermedad en Isla María y colabora con institutos investigadores. Hoy los demonios son una especie protegida y símbolo del servicio de parques de Tasmania.

• Poseen agudos sentidos del olfato, la vista, el tacto y el gusto, esenciales para localizar carroña.
• Son el mamífero depredador nativo más grande de Tasmania tras la extinción del lobo de Tasmania.
• No son solo un personaje de Looney Tunes; son marsupiales emparentados con koalas y canguros.
• Su nombre alude a su temperamento feroz y a sus mandíbulas descomunales para triturar huesos.
• Emplean bostezos amenazantes para expresar miedo e incertidumbre, no agresión.
• Un fuerte estornudo puede preceder a una pelea como ritual social para reducir daños potenciales y graves.
• Durante los enfrentamientos, sus orejas se enrojecen y luego uno cede, evitando lesiones graves.

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